Noelia Mota: "Fue la alternativa soñada"

"La amistad que hay fuera del ruedo dentro no existe; cada uno va a lo suyo y a triunfar uno mismo. Y eso pasó ayer con mis compañeros", declara la torero a caballo.

"Fue la alternativa soñada. Llegar a triunfar con esos dos grandes maestros fue algo inolvidable y compartir un día tan especial al lado de ambos fue muy gratificante. Afortunadamente las cosas salieron muy bien, y eso que mi primero no ayudó demasiado porque terminó rajándose en tablas; pero con el otro sí disfruté un montón, maté bien y logré cortar un rabo que supone un gran aliciente para mi carrera", señala Noelia Mota un día después de tomar la alternativa en la plaza de toros de Cuenca, en el último festejo de su Feria de San Julián.

"Había que dar el paso de la alternativa, tenía que llegar el momento y este año vi que era el correcto. Si quiero entrar en las grandes ferias lo suyo es tener la alternativa tomada y yo, gracias a Dios, ya la he tomado", explica la torero a caballo madrileña pero afincada en tierras conquenses.

Sobre las palabras de Hermoso de Mendoza en el momento de la ceremonia del doctorado, comenta: "Aunque no me acuerdo muy bien por los nervios que tenía, recuerdo que Pablo me dijo que estaba enormemente ilusionado de estar a mi lado en un día tan especial para mí. Me aconsejó que siempre mire hacia adelante y me reconoció que este mundo es muy bonito pero también muy duro, y que esa dureza yo ya la había comprobado en primera persona. Comentó que me lo merezco todo y, en general, estuvo muy cariñoso".

Además, Diego Ventura le brindó la muerte de su primer toro: "Me deseó muchísima suerte y me dijo que estuviera tranquila. Con su brindis se me escaparon algunas lágrimas", admite.

En cualquier caso, tal y como reconoce Mota: "La amistad que hay fuera del ruedo dentro no existe y cada uno va a lo suyo y a triunfar uno mismo. Eso pasó ayer y por eso el espectáculo fue grande para la gente y los tres logramos salir a hombros. Había soñado cortar un rabo, pero despierta nunca llegué siquiera a imaginarlo. Hacía treinta años que nadie cortaba un rabo en Cuenca, que es plaza de segunda. Y lo he conseguido yo y por eso no puedo estar más que feliz".